Detectan doble facturación en playón de Esandi que implicaría un fraude de millones de pesos

Por Diego Llorente
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El área de Tránsito y Transporte es un verdadero dolor de cabeza para el gobierno municipal. En el primer año pasaron dos encargados por el área (Alejandro Miglio y Ernesto Cosovi), aunque ninguno parece conformar al jefe comunal. Miglio estuvo sólo unos meses en la gestión y Cosovi se encuentra con un pie afuera del Gabinete, y muy cuestionado. 

De hecho, está hace aproximadamente un mes de vacaciones, cuando en el área se están dando importantes cambios como el Transporte Urbano de Pasajeros (TUP) y la modalidad de cobro del Estacionamiento Medido. Sumado a todas las demás implicancias que tiene esa cartera, que no son pocas ni sencillas.

El año pasado se detectaron miles de carnet de conducir ilegítimos en el sector de licencias, lo que generó que se interviniera el área y se traslade al personal implicado. Era un “negocio” de varios años que no había sido descubierto.

En este contexto, El Cordillerano pudo conocer otro escándalo que salpica a la Subsecretaría de Tránsito y Transporte. El caso en cuestión se suscita en el Playón municipal ubicado sobre calle Esandi, destinado a los colectivos de larga distancia y a los autos que son acarreados por la grúa.

El intendente tiene en sus manos, según pudo conocer este diario, un informe que denuncia que el personal del sector -no se sabe quién está implicado ni a cuántas personas incluye esta irregularidad- realizó durante un largo tiempo, una especie de doble facturación en concepto del pago por la estadía y la convalidación de los colectivos.

Vale mencionar, que cada micro que pernocta allí por un tiempo determinado, debe abonar un canon. También pagan todos los ómnibus que no son de Bariloche y que salen a hacer excursiones o cualquier tipo de salida dentro del ejido urbano. Ese pago, es por cada pasajero transportado.

Por ejemplo, si un colectivo proveniente de un país limítrofe o de cualquier punto del país (que no sea Bariloche), llega a la ciudad con pasajeros y durante su estadía realiza viajes a Circuito Chico o a cualquier lugar del ejido, debe abonar una tarifa por la totalidad de los pasajeros que transporta, por día. 

El cobro por esos dos conceptos (estadía y traslado de personas), lo efectúan empleados municipales en el mismo playón de Esandi. 

En ese contexto, se detectó luego de un análisis de seis meses, que se realizaban reimpresiones de facturas para cobrar, ya que se hallaron comprobantes con el mismo número, pero con importes distintos.

En la práctica, se imprimía la factura y automáticamente se la anulaba, después se hacía una reimpresión de la misma factura, con la cual se le cobraba al chofer del colectivo, pero no dejaban el duplicado en la Municipalidad sino que se lo hacía desaparecer. Entonces, a la Comuna sólo se le presentaba el original anulado por estar mal confeccionado. Mientras que un empleado se quedaba con el dinero pagado.

De esa forma, dejaron de ingresar a las arcas municipales miles de pesos, que aún no han sido cuantificados y se está llevando adelante una investigación para dar con los responsables. 

Hay diversas facturas por importes de 3, 5 y 7 mil pesos cada una, las cuales sumadas a lo largo del tiempo, pueden dar un número millonario. Al parecer, esta maniobra llevaría más de dos años realizándose, lo que hace incalculable la cantidad de dinero que se le estaría sustrayendo al municipio. 

Todo indica que el Ejecutivo Municipal descubrió este desfalco al tener acceso a esos duplicados con los cuales se cobraba y que quedaban guardados en el sistema. Y Gennuso estaría analizando intervenir el área del playón de Esandi, que actualmente tiene a siete trabajadores en funciones.