Pidieron tres años de prisión para pastor de iglesia Pentecostal por varios hechos de abuso sexual

Se trata de una causa que sigue a puertas cerradas el tribunal de la Cámara Segunda del Crimen contra José Lucino Figueroa, un pastor de 69 años de edad nacido en la localidad de Epuyen, en la vecina provincia de Chubut.

Al sujeto, se le atribuyen una serie de hechos tipificados como abuso sexual simple, agravado por su condición de pastor. El primero de los episodios habría ocurrido entre junio y julio de 2006, contra un niño de 13 años de edad, al que con la excusa de entregar una llave, hizo concurrir a su iglesia para tocarle los genitales de un modo lascivo.

Otro de los episodios habría ocurrido en la madrugada del 25 de septiembre de 2006 y también tuvo por víctima a un niño de 13 años. Fue en ocasión de un velorio que se celebraba en la iglesia y con la excusa de pedir compañía por sentir miedo a estar sólo. Logró que su víctima lo acompañara y aprovechó la ocasión para tocarle sus genitales e intentar besarlo en la boca. Con este niño repitió su accionar en varias ocasiones, desoyendo el reclamo de la madre del menor y entregándole dinero a cambio de que guarde el silencio.

Otro de los hechos atribuido ocurrió entre junio y julio de 2008, en el interior de una tienda de ropa a donde había asistido con un menor de 13 años con la excusa de comprarle ropa para participar del coro de su iglesia. Mientras la víctima estaba en los probadores, aprovechó para tocar sus partes íntimas. Cuando el joven creció enfrentó a su agresor diciéndole que ya no podría concretar los abusos, a lo que el acusado respondió que lo quería como a un amigo.

El cuarto hecho que le imputan a Figeroa tuvo por víctima a otro joven al que pidió que lo acompañara a una obra en construcción, circunstancia que aprovechó para tocarle los genitales.

El quinto hecho tuvo por víctima a otro feligrés, promediando el 2010. La víctima había concurrido para llevarle productos de cosmética que comercializaba su pareja. Aprovechando que ambos estaban solos, Figueroa se le abalanzó y mientras tomaba sus genitales le manifestó “yo hace mucho tiempo que estoy enamorado de vos”.

En cada uno de los hechos hasta aquí indicados el imputado aprovechó la relación de autoridad que tenía sobre sus víctimas, así como su marcada influencia sobre cada una de aquéllas, debido a su condición de ministro de la Iglesia Unión Pentecostal.

Al término de la audiencia desarrollada ayer, el f iscal de Cámara subrogante, Guillermo Lista, reclamó una pena de tres años de prisión. En tanto la defensa bregó por la absolución.