30/04/2013

Barilochenses participan de la Feria Internacional de Buenos Aires

-A TRAVES DE SUS LIBROS- Si bien el cónclave editorial coincide con el conflicto entre la Secretaría de Cultura de Río Negro y la mayoría de los escritores de la provincia, no son pocas las obras de los autores de aquí que dan el presente en Palermo.

A través de sus libros, un conjunto importante de escritores barilochenses -cultores de las más diversas disciplinas- participa desde el último jueves de la 39na Feria Internacional del Libro de Buenos Aires. A pesar de los embates gubernamentales de fines de 2012, el evento máximo de la industria editorial se lleva a cabo una vez más en el predio que la Sociedad Rural Argentina posee en el barrio capitalino de Palermo.  

 

Los autores que editaron sus textos a través de Editorial Caleuche en los últimos tiempos, están presentes a través del acuerdo entre ese sello barilochense y Patagonia Sur Libros, editora y distribuidora que si bien tiene su sede en el norte del conurbano bonaerense, se especializa hace décadas en temáticas patagónicas. El stand en cuestión lleva el número 119 y ocupa un espacio en el Pabellón Azul del inmenso complejo ferial.  En consecuencia, gracias a la presencia de sus obras toman parte del mega-evento varios vecinos, entre ellos, la poeta y novelista Laura Calvo, quien hace 20 días presentó en Bariloche su flamante “La patria de Laurita”, justamente un lanzamiento de Caleuche. Por su parte, Raúl Izaguirre, director del sello barilochense, corrió contra reloj para poner a consideración de la gente una nueva reimpresión del “Diccionario mapuche -español español - mapuche”, cuya primera edición data de 1999. La publicación reúne el trabajo de la doctora Carmen Zucarelli, la licenciada Marisa Malvestiti, el referente mapuche Jorge Nahuel y el propio Izaguirre. Durante el verano se habían agotado los últimos ejemplares.  

Además, están presentes en los exhibidores de Patagonia Sur Libros las obras de dos queridos vecinos de Bariloche, a disposición de la demanda del público capitalino. Se trata de “Plantas de la Patagonia para la salud”, de la médica naturista Sara Itkin, y del episodio de “Cabo Savino” que años atrás se hizo libro, desde ya con la firma de Carlos “Chingolo” Casalla.

El lago como atractivo

Por otro lado, suelen concitar la atención de la gente de Buenos Aires “Toponimia del Parque Nacional Nahuel Huapi”, obra monumental de Juan Martín Biedma y más recientemente, “Las modestas del Nahuel Huapi”, libro de Carlos Solari que recrea la historia de la navegación en el gran lago que caracteriza a esta ciudad. Además, en la tradicional “Guía Patagonia” edición 2013, los viajeros que tengan intenciones de adentrarse en la región encontrarán todos los datos necesarios para organizarse una estadía placentera.  En términos de novedades, se ofrece además en el stand “patagónico” de la Feria del Libro, “Komütuam descolonizar la historia mapuche en Patagonia”, de Adrián Moyano. El libro se dio a conocer hace 10 días en Bariloche, con considerable repercusión.

Desde ya, la publicación comparte espacio con “Crónicas de la resistencia mapuche”, el primer libro del mismo autor.  La temática indígena es una de las características de Patagonia Sur Libros, que se consagró a editar en los últimos años varios títulos de la obra de Ramón Lista sobre el pueblo tehuelche, inclusive de manera bilingüe. La presente edición del cónclave editorial implica una importante emoción para Patagonia Sur Libros, ya que exhibe el último libro de Arnulfo Basanta, escritor santacruceño que dejó de existir en marzo último, cuando su postrer obra estaba en imprenta. Se trata de “El Correo Argentino en Patagonia”, trabajo que expresa la entrañable historia de la repartición donde Basanta se desempeñó durante 44 años, nada menos. En definitiva y más allá de los puestos oficiales, más institucionales que “libreros”, el rinconcito de Patagonia en la feria capitalina queda en el Pabellón Azul.

Momento raro

La realización de la Feria Internacional del Libro de Buenos Aires encontró a los escritores de Río Negro en el momento más tirante de su relación con la Secretaría de Cultura de la provincia. Como se recordará, la decisión gubernamental de comercializar en el stand oficial únicamente los libros del Fondo Editorial Rionegrino (FER), fue objeto de airadas críticas. Más aún si se tiene en cuenta que el organismo sufre una parálisis que data de dos años.

Es más, en las fotos que envió el Ministerio de Turismo, Cultura y Deportes se puede apreciar la elegancia del stand pero también su vacío en relación a obras exhibidas.  En otro orden, no sólo en Patagonia Sur Libros pueden encontrarse obras de autores barilochenses. El año pasado, Luisa Peluffo publicó “Se llaman valijas” a través de Gárgola Ediciones, que tiene su propio circuito de distribución a escala capitalino. Otro tanto sucede con los libros de Abel Basti sobre el nazismo en Bariloche, en particular con el título que publicó a través de Sudamericana, una de los pesos pesado de la industria editorial.

Te puede interesar
Ultimas noticias